La nostalgia se apoderó de los asistentes quienes regresaron a su Alma Máter  

 

El día era soleado, propicio para conversar debajo de las sombras de los árboles que rodean la plaza Bolívar de la Universidad Nacional Experimental del Táchira, eso no estaba allí cuando hace treinta y cinco años recibieron las primeras promociones de agronomía su título universitario de parte del rector Francisco Rad Rached.

El júbilo por el reencuentro trajo desde distantes lugares de la geografía nacional a los ingenieros agrónomos de la tercera promoción, muchos no se veían desde aquella época que siendo muchachos, salieron, a buscar el destino con las expectativas como profesionales sembradas por la universidad.Los saludos y las anécdotas, la emoción, algunas lágrimas conjugaron el encuentro.

La actividad comenzó con una misa en la parroquia universitaria Divino Maestro de la UNET ofrecida por el padre Sergio Suárez, el pedido por la salud de los asistentes, por la permanencia en el tiempo de la universidad, por un mejor país, fueron los ruegos solicitados en la capilla. Luego se dirigieron a la plaza Bolívar donde ofrendaron al Libertador.

Durante el acto el ingeniero Carlos Chacón Labrador como miembro del comité organizador tomó la palabra para agradecer la presencia de todos en especial al rector Raúl Casanova Ostos quien fue compañero y recordó “Quien se iba a imaginar que quien durmió al lado nuestro en la hamaca, hoy es rector de la UNET, de manera que es una doble satisfacción la que tenemos. Estamos muy contentos de estar aquí así como hemos dado gracias a Dios, vamos a reconocer y honrar  la memoria de nuestro Libertador en esta plaza que significa tanto para nosotros”

El profesor e historiador, cronista de Boconó,Ubaldo García, fue el encargado de decir las palabras en el acto quien comenzó agradeciéndole a la vida y en especial a las familias que decididamente apoyaron para que estudiaran en la “U”. “Cuantos llegamos para compartir bajo el cielo tachirense y cuantos tenemos la satisfacción de mirarnos esta hermosa mañana. Es un verdadero privilegio encontrarnos con los amigos de entonces y que seremos amigos de siempre”.

Durante su alocución hizo una alegoría a la amistad y lo que ella conlleva como factor determinante para unir y forjar los apegos en el tiempo dentro del respeto. “Estos eventos son milagrosos, muy esperados y emocionantes. Cuando sacamos las cuentas de nuestro andar, hemos ido por caminos distintos con muchas dificultades y esfuerzos, muchas satisfacciones y alegrías, y al mirarnos a la cara nos encontramos iguales, nos parecemos mucho a pesar de las diferencias y por eso podemos reír con franqueza. La amistad es la grandeza de la vida y Dios nos acompañará siempre”.

Conversatorio

Para concluir se desarrolló un conversatorio con el decano de extensión, José Andrés Molina y los profesores del departamento de agronomía con el objetivo de intercambiar experiencias que a lo largo de los treinta y cinco años de graduados han desarrollado con trabajo y como productores.

Generar una retroalimentación para mejorar la carrera de agronomía para hacerla más atractiva a los estudiantes y romper con la baja inscripción, así como nutrir el departamento de ideas de qué deben hacer para mejorar los programas y darle el apoyo necesario para los cambios para el fortalecimiento del régimen de estudios.

También discutieron la posibilidad de recibir pasantes en las fincas de los ingenieros hay productores muy exitosos en las distintas áreas de la producción. Terminaron el día con una actividad social que sirvió para proponer nuevos intercambios y reencuentros. /Texto y fotos: Ricardo Ramírez Rivas. Fotos: Manuel García